Todas las personas que participarán en la actuación de mañana, son de Lekeitio y uno de los objetivos de este concierto es el de dar a conocer a la comisión que tiene por objeto la restauración del instrumento.
El órgano de la Basílica Nuestra Señora de Asunción, de Lekeitio, es uno de los bienes culturales más importantes de la villa. Se trata de un instrumento de una calidad excepcional.
Un poco de historia
José Javier Uribarren (1791-1861), banquero lekeitiano y gran benefactor de la villa, quiso dotar a la basílica del mejor órgano posible para su época. Como residía en París, se dirigió al mejor organero francés del momento: Aristide Cavaillé-Coll, considerado como el precursor y más importante constructor de órganos románticos. Algunos de sus instrumentos son el de Notre-Dame, Saint Sulpice, Saint-Denis, todos en París.
El de Lekeitio, construido en 1854, fue el primer órgano de su género no solo en el País Vasco, sino en todo el estado español. Su calidad y sonido causó tanta impresión que posteriormente numerosas ciudades quisieron contar con instrumentos similares: San Sebastián, Loyola, Azkoitia, Bilbao, Barcelona, Madrid…
Restauración
Responsables del templo y de la asociación de Amigos del órgano de Lekeitio indican que de no acometerse esta restauración los daños podrían llegar a ser irreversibles. El trabajo sería realizado por un organero especialista en órganos románticos, con un presupuesto estimado de 600.000 euros.
La asociación está buscando los recursos necesarios, tanto entre las instituciones como a nivel privado, para poder abordar este reto. Teniendo en cuenta el objetivo de la recaudación de fondos, se ha abierto una cuenta bancaria para destinar cualquier aportación privada a esta importante restauración.