El retablo, de estilo tardogótico, es uno de los escasos ejemplos de este estilo en Bizkaia, por lo que fue declarado Bien cultural calificado con la categoría de monumento por el Gobierno Vasco en el año 2010.
La intervención, larga y compleja, ha permitido conocer algunos aspectos inéditos del retablo, como la estructura de anclaje al muro, así como reestablecer el diseño original de su sección central (muy alterada en las reformas de los siglos XIX y XX). Especialmente sobresaliente ha sido la recuperación de la espléndida policromía que permanecía oculta bajo los últimos repintes, en la que se utilizó entre otras la más refinada técnica del momento: el brocado aplicado, cuyo análisis está haciendo posible a restauradores e historiadores establecer conexiones con otras obras de la época.
Tras un aplazamiento el año pasado debido a la situación sanitaria, se presenta ahora esta publicación monográfica en la que se recoge la historia de la iglesia parroquial de Arrieta y el proceso de investigación llevado a cabo de forma paralela a la restauración de esta excepcional obra que ofrece el más amplio repertorio de escenas de la vida del Santo existente entre los retablos de todo el estado.