El actual deán de la catedral de Santiago, Luis Alberto Loyo, nada más conocer la información reconoce que ha recibido con mucha alegría la noticia de la declaración de venerable, del siervo de dios con Mariano José de Ibarguengoitia “fue gran promotor de la vida religiosa en la Villa de Bilbao, favoreciendo la instalación en ella de diferentes comunidades como las religiosas del refugio, las Hijas de la Cruz y los P. Pasionistas, pero sobre todo –añade Loyo– destacó por la ayuda fundamental a Santa Maria Josefa del Corazón de Jesús, para fundar el Instituto de las Siervas de Jesus de la Caridad, del que fue su director espiritual hasta su muerte el 1888. Justo en ese año se concluyeron las obras de remodelación de la fachada principal con la belleza que hoy podemos contemplar”.
El deán de la catedral resalta que D. Mariano “fue un ejemplo de sacerdote entregado al servicio de sus fieles, capaz de descubrir la acción del Espíritu Santo en los carismas religiosos por medio de los cuales, el Señor le llamaba a servir a los enfermos, pobres y marginados de la sociedad bilbaína del momento. Pedimos al Señor que pronto sea declarado Beato, Y así su vida sea propuesta como modelo de santidad en el seguimiento de Jesús”.
En este enlace podemos ver un video realizado con motivo del bicentenario del nacimiento de Ibargüengoitia y de la exposición sobre su persona que se llevó a cabo en 2015, en la catedral de Santiago en la que el propio Loyo realiza un amplio repaso sobre su figura. Más información: aquí.
Ibargüengoitia
Promotor de las Primeras Comuniones solemnes de niños; introductor del `mes de María´ en Bilbao; impulsor de la fundación de las Siervas de Jesús de la Caridad y del `Refugio de Begoña´, donde se acogía a mujeres necesitadas y determinante en el asentamiento de los pasionistas en el País Vasco. Ibargüengoitia fue una de las personalidades más influyentes del siglo XIX en la capital vizcaína.
Causa de Beatificación
Santa María Josefa fue una firme defensora de la figura de D. Mariano y de promover su vida y obra y precisamente las religiosas Siervas de Jesús de la Caridad son quienes han promovido su causa de canonización, que fue abierta en la Catedral de Santiago el 27 de septiembre de 2003.