Las niñas y los niños de 4º de Primaria del colegio Patronato Santa Eulalia están inmersos en una «misión» muy importante durante estas semanas: recogen mantas para las personas sin hogar.
Hace unos días recibieron la visita de Iñigo y Amaia, parte de la tripulación del barco de Salvamento Marítimo Humanitario Aita Mari. Ambos les explicaron qué hacen en el barco y les narraron historias de algunas de las personas rescatadas con las que se han encontrado meses o años después.
Sobre todo, les hablaron de «solidaridad, acogida, encuentro y generosidad» para garantizar la dignidad y los derechos de todas las personas en esta sociedad.
Razones para migrar
También les contaron las razones tan tristes y difíciles por las que las personas que rescatan salen de sus países: guerra, hambre, violencia, discriminación…. «Llegan a Europa con la esperanza de encontrar una vida mejor y, a menudo, no se encuentran las cosas nada fáciles«, les contaron.
Algunos de ellos, llegan a Bilbao y no tienen dónde vivir o dormir y están en la calle.
El alumnado se puso en contacto con Ongi Etorri Errefuxiatuak para conocer de primera mano la situación de estas personas sin hogar, en Bilbao. Desde la organización, les trasladaron que “a día de hoy son alrededor de 500 chavales los que duermen en las calles de la capital”.
Manos a la obra
Tocados por esa durísima realidad , los niños y niñas acordaron hacer una recogida de mantas para esas personas e inmediatamente se pusieron manos a la obra en la organización.
Esta semana, han extendido a sus compañeros y compañeras de catequesis de 3º de la Unidad Pastoral de Santurtzi su objetivo. Se reunieron con las familias de los niños y niñas que en mayo recibirán la Primera Comunión, y consiguieron que se conviertan en «sus aliados» para la recogida “porque aunque tengamos sólo 10 años, nosotros también podemos ayudar”, afirman.
Sin duda, un reto que reflejará la solidaridad de las niñas y niños de la Unidad Pastoral de Santurtzi, «porque Jesús nos envía con otros a transformar el mundo».