Josu Sagastigordia eta Montxo Lopezek eleizbarrutian izan dabezan ardurak itzi ondoren, euren lekua hartu dabe Zallako Nekane Narbaiza Lezamak eta Balmasedako Rafa Marcos Arandak. Taldean, Amalia Arceo be izango da, heziketa arloko arduradun lez. Roberto Jauregibeitiak jarraituko dau kontsiliario lez beste lau urtez. 2023-2024 kurtsotik aurrera, Jorge Torralbo da presidente eta Begoña Cerrato zabalkunderako arduradun.
Josu eta Montxok erronkak eta giltzak aurkeztu dabez, “para seguir construyendo una Iglesia encarnada en el mundo obrero y comprometida con la dignidad del trabajo”:
Josu Sagastigordia Apraiz
¿Qué ha supuesto tu paso por la Comisión Diocesana de la Hoac?
Han sido cuatro años muy enriquecedores, de compartir vivencias, inquietudes, alegrías y también retos junto a los y las militantes de la Hoac, y especialmente con las compañeras y compañeros de la Comisión Diocesana. Ha sido un espacio de aprendizaje continuo, donde he podido conocer más de cerca la riqueza, diversidad y también las dificultades que viven los distintos equipos. Podría decir que este tiempo me ha permitido tomar una mayor conciencia de la realidad concreta de la militancia en la diócesis y del valor de construir comunidad desde lo pequeño y cotidiano.
¿Qué te ha podido aportar y en qué has podido contribuir?
Personalmente, me ha aportado una visión más amplia del conjunto de la Hoac, fortaleciendo mi compromiso y mi sentido de pertenencia. He aprendido mucho del trabajo en equipo, del diálogo y del discernimiento compartido. En cuanto a mi contribución, he intentado poner mi granito de arena dinamizando la vida organizativa y comunitaria, buscando nuevas formas de participación y cuidando los vínculos entre los equipos. También he procurado que la Hoac tenga presencia en otros espacios eclesiales y sociales, para hacer visible nuestra propuesta y sumar en procesos de transformación desde el Evangelio.
¿Cómo ha evolucionado en este tiempo la labor de organización y vida comunitaria de la Hoac?
Durante estos años, desde la sección, hemos puesto empeño en fortalecer los lazos entre los diferentes equipos, promoviendo una comunicación más fluida y el conocimiento mutuo. Se ha insistido en la importancia de participar en los encuentros y actividades comunes, como espacios para compartir vida, reflexionar juntos y alimentarnos como comunidad militante. Aun así, somos conscientes de que aún queda camino por recorrer, especialmente en lo que respecta a fortalecer las secciones, que permitan una mayor sinergia.
En estos tiempos de aceleración e incertidumbre, ¿qué papel puede jugar la organización y vida comunitaria en la HOAC?
Vivimos momentos de gran exigencia personal y social, donde muchas veces la prisa, la fragmentación y la sobrecarga de compromisos nos desconectan de lo esencial. En este contexto, la organización y la vida comunitaria en la HOAC son fundamentales como espacios de cuidado, escucha y sostenimiento mutuo. Desde esta sección, es clave acompañar a la militancia para que no vivan su compromiso en soledad, sino que encuentren en la comunidad un lugar donde compartir, discernir y renovar fuerzas. Solo desde esa comunión profunda podremos seguir haciendo creíble y fecunda la misión transformadora de la Hoac.
Montxo Lopez Gomez
¿Cómo ha sido tu experiencia al frente de esta responsabilidad dentro de la Comisión Diocesana de la HOAC de Bizkaia?
Ha sido una experiencia muy rica, con muchos sabores… Hemos compartido el trabajo de la militancia, saboreado la ilusión de los equipos, degustado la experiencia y la lucha de muchas personas en el mundo obrero y su compromiso con la Iglesia. Una experiencia profunda, de aprendizaje comunitario, compromiso compartido, escucha activa y esperanza en la militancia obrera.
¿Qué mejoras consideras que habría que seguir impulsando y qué otros aspectos habría que mantener?
Creo que hay que seguir cultivando la relación con otras realidades eclesiales, tanto en lo que se refiere a la coordinación con los movimientos de Acción Católica, como con las organizaciones que trabajamos en torno a la Iglesia por el Trabajo Decente. Como dijo el Papa Francisco, “el gran tema es el trabajo”.
¿Por dónde crees que pasa el futuro de compromiso de este movimiento de trabajadores cristianos?
El compromiso permanente de la militancia hoacista es estar con las personas del mundo obrero empobrecido: en sus organizaciones sociales, políticas y eclesiales. Debemos extender nuestra presencia en los ambientes, iniciar nuevos equipos, acercarnos a las personas migrantes, acompañar a las familias que sufren la precariedad, a las personas que comparten la preocupación por un trabajo digno para una sociedad decente. En resumen, estar cerca del mundo obrero empobrecido, organizando equipos, acompañando luchas, defendiendo trabajo y dignidad humana.