Tras su restauración, el pórtico de la basílica de Durango, ha necesitado adecuar la iluminación a la nueva estructura.
El equipo de Gobierno del ayuntamiento de Durango, solicitó un estudio detallado con mediciones de iluminación y los resultados del estudio revelaron que la complejidad estructural de la cubierta presentaba desafíos significativos.
Se han activando adicionalmente los focos situados en la pared de la iglesia, pasando así de la escena inicial, centrada en la iluminación de la estructura, a una nueva configuración que busca mejorar la visibilidad general del pórtico.
Un pórtico único
Fue construido en 1681, y es el pórtico de madera con mayor luz libre conocido en Europa.
Adosado a la basílica, es un espacio de encuentro tanto de eventos religiosos como sociales. Entre sus múltiples usos a lo largo de su historia, destacan la celebración de mercados, eventos religiosos, feria del libro y disco vasco, conciertos, encuentros sociales… en definitiva, ha terminado convirtiéndose en una plaza pública.
