El obispo de Bilbao, del mismo barrio que Kepa Junkera, en Rekalde ha visitado al músico y su familia esta misma semana. Como se aprecia en la imagen que acompaña a estas líneas el trikitilari mantuvo el ánimo y el buen humor durante el encuentro.
Ayer, fue un día lleno de emoción, ya que Junkera se presentó por primera vez en público, tras cuatro años. Acudieron muchas personas cercanas, que quisieron expresarle su admiración y cariño. La película Berpiztu que recoge su vida, no dejó indiferente a nadie. «Un documental impresionante. Muestra claramente que ha sido un animal en el escenario y su parte más humana, en la que se deja grabar ante la debilidad y fragilidad», comentaban a la salida algunas personas.
Su ama Conchi, con 90 años, al igual que sus hijos y demás familia le arroparon en todo momento. La larga ovación que le dedicó el público en la sala cuando entró, fue uno de los puntos álgidos de una jornada cargada de emociones.
Aplausos en Lekeitio a Benito Ansola
En la villa costera, se presentó la cinta que recoge los hitos fundamentales de la vida del presbítero Benito Ansola. Su niñez en Lekeitio, el traslado de la familia a Bilbao, su afición al cine, el seminario, la vocación y su manera de afrontar la vida, con sencillez y con amor. Precisamente este es el mensaje que transmite a través de la entrevista que recoge su biografía: «quisiera que me recordaran como una persona buena. Lo que mueve este mundo es el amor».
Al finalizar la emisión de la película, con la que se inauguró el Festival de Cine en euskera, el público se arrancó con un aplauso. Este próximo sábado, rendirán un homenaje a D. Benito – así le llaman en Lekeitio-, con la proyección de la última película que dirigió.