¿Vive de alguna manera especial estos días?
Siempre, cuando llegan estas fechas me vuelve el recuerdo de lo que pasó y te influye bastante. En casa también lo recordamos porque revivimos la historia y aún algunas personas en mi casa no han pasado el duelo como es debido.
¿Cómo ha conseguido superar el duelo del asesinato de su marido?
La fundación Lagungo me ha ayudado mucho. Yo quería salir y encontrarme mejor, sobre todo, por mis hijas. Gracias al centro familiar y a la ayuda de Dios, porque la fe ha sido siempre fundamental en mi vida, he conseguido superarlo.
¿Qué pueden aportar las mujeres en el proceso de la paz y la reconciliación?
El mensaje de Jesús es de un amor sin condiciones y las que somos madres sabemos lo que significa. Creo que las personas creyentes en nuestra manera de comportarnos en el día a día podemos mostrar mucho y seguir implicándonos, porque parece que nos hemos acomodado y que las víctimas a veces somos como un poco incómodas.
Entrevista completa en el número de la revista diocesana correspondiente a junio.