El religioso claretiano Juan Martín Askaiturrieta habla sobre el sentido de la vida religiosa en el mundo actual. En la entrevista realizada para el próximo número de la revista diocesana con motivo de su estancia en Bilbao, ofrece algunas claves sobre el hecho de ser religioso hoy.
Reconoce que, a pesar del escándalo de los abusos, abundan más las actuaciones positivas que las negativas entre los religiosos. En este sentido, considera que hoy en día «mantiene todo su sentido la vocación de la vida consagrada» en esta sociedad.
Ejercicios espirituales
Askaiturrieta ha estado guiando durante esta semana los ejercicios espirituales de los presbíteros del grupo en euskera. «Estoy muy feliz acompañando a los sacerdotes, ya que también me sirven para aplicarme a mí mismo los mensajes que estoy trasladando».
El P. Juan Martín, de 46 años, nació el 10 de junio de 1976 en San Sebastián. Ingresó en el Noviciado el 8 de septiembre de 1995, en Loja, Granada (España), e hizo su Primera Profesión el 14 de septiembre de 1996, en Donostia, en manos del P. Ramón Najarro, CMF.
Realizó su Profesión Perpetua el 7 de junio de 2003, en Lejona, en manos del P. Joseba Kamiruaga, CMF. Fue ordenado sacerdote el 21 de octubre de 2006, en Lejona, por el Cardenal Ricardo Blázquez Pérez, entonces obispo de la Diócesis de Bilbao y Presidente de la Conferencia Episcopal de España.